Originaria del s.XIX, 100% ecológica y con todo el carácter mediterráneo
Da igual como lo llames: vermut, vermú o vermouth. Esta es la receta original del primer vermut de Barcelona.
Ingredientes principales
Ajenjo
Su nombre en alemán Wermutkraut, bautizó al vermut. Es conocida como la madre de todas las hierbas y su sabor amargo era indispensable para conseguir ese toque auténtico de nuestro vermut.
Tomillo
El aroma a prelitoral mediterráneo era un must, así que el sabor intenso con matices picantes del tomillo no podía faltar. Solo esta planta aromática podía simbolizar tan bien nuestro paisaje.
Canela
Persistente, cálido, suave y dulzón. El aroma de la canela aporta al vermut un agradable sabor que lo hace tan reconocible como familiar.
Genciana
Su olor y sabor amargo son uno de los responsables del perfecto equilibrio entre acidez, amargor y dulzor de nuestro vermut.
Vainilla
No existe un lugar en el mundo donde no se admire la dulzura de la vainilla, y Barcelona no es la excepción. Junto con la nuez moscada, aporta los toques especiados tan característicos de nuestro vermut.
Naranja amarga
Su nombre lo indica. Ese sabor amargo similar al del regaliz no solo nos da carácter mediterráneo, también nos ayuda a conseguir la intensidad aromática deseada.
Ingredientes principales
Ajenjo
Su nombre en alemán Wermutkraut, bautizó al vermut. Es conocida como la madre de todas las hierbas y su sabor amargo era indispensable para conseguir ese toque auténtico de nuestro vermut.
Tomillo
El aroma a prelitoral mediterráneo era un must, así que el sabor intenso con matices picantes del tomillo no podía faltar. Solo esta planta aromática podía simbolizar tan bien nuestro paisaje.
Canela
Persistente, cálido, suave y dulzón. El aroma de la canela aporta al vermut un agradable sabor que lo hace tan reconocible como familiar.
Genciana
Su olor y sabor amargo son uno de los responsables del perfecto equilibrio entre acidez, amargor y dulzor de nuestro vermut.
Vainilla
No existe un lugar en el mundo donde no se admire la dulzura de la vainilla, y Barcelona no es la excepción. Junto con la nuez moscada, aporta los toques especiados tan característicos de nuestro vermut.
Naranja amarga
Su nombre lo indica. Ese sabor amargo similar al del regaliz no solo nos da carácter mediterráneo, también nos ayuda a conseguir la intensidad aromática deseada.